Gastón Martino, el hombre tras Allman.
“…una sociedad que inconscientemente
sigue unida a un pasado que puede desbaratarla”
Gastón G. Martino es un hombre apasionado por la ficción y la imagen en casi todas sus formas, un colaborador fundamental de nuestra revista que cuenta con su propia sección de reseñas en Exégesis, La baulera de Allmanzor, y al que siempre encontramos en su fiel cita con el hilo de comentarios de cada una de nuestras publicaciones en la web. Parece un tipo entusiasta, una cualidad que sin duda le habrá ayudado a sacar adelante Allman: los olvidados del infierno, una de las series de más éxito y longevidad de nuestra revista, una space opera apasionante y muy, muy espectacular, que cautiva a nuestros lectores desde febrero de 2010 y cuyo desenlace final encabeza el número 19 de Exégesis. No se me ocurre mejor momento para charlar un poco con él sobre toda esta aventura…
MARC ROCA, EXÉGESIS: Allman es una serie muy larga y con un trabajo visual muy complejo, una tarea muy ambiciosa para un autor no profesional. No debe resultar sencillo mantener el necesario grado de esfuerzo y perserverancia que requiere una obra de tal magnitud…
GASTÓN MARTINO: En efecto, no resulta fácil, pero hay tres claves que lo hacen posible: ilusión, disciplina y organización. De lunes a viernes lo dedico al trabajo, y después me meto unas dos horas con el dibujo. También intento hacerlo un rato los fines de semana. Así, manteniendo esa constancia, ves que las páginas van saliendo. Lenta, pero constántemente, y un día te das cuenta de que ya llevas media historia y te dices: “ánimo, que el final está a la vista. ¡Lo puedes conseguir!”.
E: No creo que “Allman” sea un nombre casual, ¿a qué se debe?
GM: Mmm… en realidad no tiene mucho misterio. Una de las cosas que hago a veces es poner a mis personajes nombres de músicos de los estilos que suelo escuchar. ¿Conoces a la banda The Allman Brothers? De ahí viene el nombre, aparte de que me parecía que a nuestro oido Latino le suena fuerte, con buen porte. Me gustó cómo le quedaba al personaje y así fue bautizado.
E: Sin embargo a ti te conocemos como “Allmanzor” por la red… ¿no hay relación?
GM: ¡Ja ja! Cierto. Verás; la cuestión es que en realidad el nombre del personaje de Allman lo tenía pensado desde hace tiempo, antes de darle forma en esta aventura. Cuando creé mi avatar y mi nick para empezar a participar en foros y tal, se me ocurrió combinar el nombre árabe Almanzor con el de mi personaje predilecto. Me gusta retorcer y combinar nombres, y de ahí viene mi alter-ego Allmanzor.
E: Entre las muchas virtudes visuales de Allman hay algo que destaca por encima de todo y que encandila a todo lector de la serie: la espectacular representación de naves espaciales, aviones, barcos y demás grandes artefactos que aparecen en el cómic. ¡incluso los edificios!
GM: Bueno, creo que en primer lugar está muy presente mi gran afición a la arquitectura y a la ingeniería aeronáutica y naval. Leer y conocer los grandes logros en la construcción de buques, aeroplanos y edificios creo que me ha dado una base adecuada para poder representarlos al menos con el cariño y el empeño necesarios.
E: ¿Nos darías algunos detalles sobre el proceso creativo que se esconde tras estas maravillosas imágenes?
Todo se reduce a actualizar las antiguas técnicas y aprovechar los avances. Es decir, antiguamente los dibujantes se valían de fotografías y maquetas para obtener los ángulos y perspectivas deseados para sus dibujos. Yo mismo, en mis inicios, hacía siluetas en cartón de aviones y vehiculos para hacerme una idea de sus perspectivas y proporciones para el dibujo. Las técnicas mejoran y hoy en día los modelos informáticos tridimensionales representan una gran ayuda para tener esa referencia que nos permite dibujar las cosas con su correcta perspectiva.
Ocurre otro tanto con el color, que aunque sea digital, lo aplico casi de la misma manera que cuando usaba acuarelas, solo que ahora voy pintando con el ratón en lugar de usar un pincel. Todo el color, los cielos y nubes, el agua, todo está hecho manualmente moviendo el cursor por la viñeta y rematándolo despues con algunos filtros para diluir los tonos. No es más que una actualización de las viejas técnicas.
E: En Allman una rama de la humanidad ha logrado reformular la sociedad para bien, pero por el camino ha pagado un precio un tanto radical: olvidar su pasado. Además de la especulación propia de la ciencia-ficción, creo que el cómic está imbuido de cierta consciencia histórica….
GM: Sí, la “nueva Humanidad” que he representado permanece, como bien has dicho, ajena casi por completo al pasado terrestre. La consciencia histórica viene representada de forma muy negativa por el presidente Pell, el único que sabe algo de dicho pasado y que pretende perpetuar su desconocimiento. ¿Es esto algo bueno o malo? Teniendo en cuenta que los ancestros de esta nueva Humanidad consideraban que el único camino era empezar de cero, el hacer borrón y cuenta nueva era la vía lógica. Tal vez el devenir Humano de la Tierra consiguiera con el tiempo lograr esos cambios deseados, pero ellos tuvieron la oportunidad de instaurarlos de forma inmediata, en un nuevo lugar, y la aprovecharon.
No voy a negar que algunas de las críticas que se hacen a la sociedad Terrestre en Allman las comparto a nivel personal, y que junto a las especulaciones tecnológicas, tambien quise aventurarme con distintos modelos sociales. En ese sentido podríamos hablar de “socio-ficción”, o algo parecido.
E: La nueva humanidad de Allman se rige por un doble sistema monetario, por así decirlo…
GM: Sí, y es un tema complejo. Que todos los aspectos de nuestra sociedad funcionen bajo el mismo principio monetario la hacen débil y vulnerable. ¿Y si intentamos separar los diferentes ámbitos en distintas parcelas, para que la mala gestión de uno no pueda desbaratar a otro? La diversificación ayuda a sobrevivir. Es ley natural…
E: La space opera no es el subgénero más prestigiado dentro de la ciencia ficción, a veces incluso no se lo considera como tal aunque a menudo incluya temas que no admiten dudas al respecto, como es el caso de Allman. Sin embargo, da lugar a grandes historias y se cuenta entre los favoritos del público…
GM: Correcto. Por lo general, las space operas tienen más elementos de fantasía que de ci-fi, pero hay que reconocer que ese marco de, digamos “futurismo”, es muy propicio para albergar historias que subyacen en el gusto colectivo: viajes, héroes, villanos, misterios… todo magnificado en los inconmensurables límites del cosmos. ¿Qué más se puede pedir?
Pero como bien has apuntado, en Allman quise dar también peso a algunos elementos de ciencia ficción. Especular con posibilidades sobre la velocidad y los viajes que, aunque inverosímiles, entran dentro de esos misterios de la materia que aun no conocemos y que pueden deparar sorpresas a los científicos en el futuro.
E: Supongo que Allman, o por lo menos Gastón Martino, cuenta con algunos referentes destacados en el género y en la ciencia ficción en general…
GM: Muchos, Marc. Muchos, jajaja. Hay un sinfín de obras que me han inspirado. De casi todas extraje pequeños detalles, pero sí que te puedo destacar algo más concreto: cuando me planteé realizar esta historia tan larga, en mi mente tenía muy presente gran parte del estilo de la saga Valerian: agente espacio-temporal. Una verdadera joya del cómic europeo que siempre he tenido como referente. Quien la conozca verá que mi elección de la ciudad de Nueva York para el desarrollo terrestre de Allman no fue casual.
E: ¿Qué es lo que más destacarías de tu propia obra? ¿Cómo se la venderías al lector que todavía no ha caído en las redes de su lectura?
GM: Bueno… Supongo que echar un vistazo a un nuevo futuro, a una sociedad con distintos principios pero que inconscientemente (por eso de las particulas entrelazadas a traves del tiempo y el espacio) sigue unida a un pasado que puede desbaratarla, sería una buena premisa. Si añadimos unos personajes femeninos tremendos, jajaja, y variopintos artefactos y escenarios, muchos pueden sentirse atraidos. No me cabe duda. Y las chicas tienen al comandante Allman, un tipo decidido y eficaz. ¡Seguro que quieren saber más de él!
Pero si me lo permites, creo que la mejor forma es ver el trailer de la serie en Youtube, una forma de anunciar cómics que se está empezando a ver muy frecuentemente.
E: ¿Algún día nos contarás como acabó el Yamato?
GM: Yamato es un guión que tengo escrito y que nació como un proyecto para animación por ordenador (computadora, para los amigos de latinoamérica) y del cual llegué a realizar algunas escenas que pueden verse en Youtube*. El trabajo era enorme y mi calidad de animador muy escasa, por lo que al final abandoné… ¡Para empezar con Allman! Una de las cosas que más me apenan de ese abandono fue desaprovechar el trabajo que amablemente realizaron algunas amigas y amigos, llegando a grabar todas las líneas de diálogo de varios de los personajes. Mi reconocimiento para ellos.
De todas formas, ya te digo que tengo ese guión que narra las peripecias de dos hermanos japoneses durante la Segunda Guerra Mundial, con el marco de fondo del buque de la marina imperial Japonesa “Yamato”, el navío militar más grande y poderoso de su época, que protagonizó uno de los episodios más épicos y dramáticos de aquella terrible contienda. Mi idea sería hacer una novela gráfica al estilo de Allman, en cuanto a técnica y longitud. Pero eso requerirá un buen planteamiento y un lugar en internet donde ir dándo a conocer la progresión de la historia. Tal vez un blog. No sé… Es algo que debe pensarse.
E: ¡Estaremos muy atentos a este proyecto! Muchas gracias por todo Gastón, y en especial por elegir Exégesis como embarcadero para Allman.
GM: Gracias a tí, Marc, por esta genial entrevista. Por otro lado, quiero aprovechar la ocasión para destacar la gran labor realizada por Blas Bigatti, que durante buena parte de la realización de la serie fue el encargado de contenidos de Exégesis, y que llevó a cabo un impecable trabajo supervisando el desarrollo de Allman. Así mismo tengo que destacar que sin la ayuda de la propia revista Exégesis, esta historia probablemente habría sido abandonada en algún momento. ¡Desde aquí, gracias a todos!
* Los vídeos merecen mucho la pena, podéis verlos aquí, aquí y aquí.
5 comentarios
Dales duro Gas!!!, que gran obra para un autor amateur!!! hay secuencias y momentos geniales. (ya te comente personalmente ciertos aspectos). Y para los que no lo sepan hay más, este hombre lleva mucho a los lápices y luego con el ordenador. Maneja muchos palos de la baraja: blanco y negro, color, acuarela, animación… Ciencia ficción, Bélico, fantasía y mas aún.
Que bien te guardaste el secreto de está página y la publicación por entregas, ja ja ja y yo que creía que seguías con el Mega Proyecto Yamato. Bueno muchas felicidades y un saludo a tus seguidores.JorgeBlog: La imaginación dibujada.
Por cierto me he dado una vuelta por la página y está muy bien. Felicidades por el proyecto!!
Un saludo
Jorge
¡Es genial que te hayas pasado por aquí, Jorge! Tengo que decir que el equipo editorial de Exégesis hace un trabajo tremendo para que los autores veamos nuestras aportaciones presentadas de forma tan bonita 🙂 Sobre todo las compilaciones completas de cada número son una maravilla. Gracias por tus palabras, y decir a todos que el blog de Jorge «La imaginación dibujada» es un lugar perfecto para recrearse con ilustraciones, pinturas y reseñas de Cómics de todas las épocas, con lugar incluso para las vanguardias. Recomiendo vivamente que lo visitéis.
Enhorabuena de nuevo por la finalización de Allman, Gastón. Realmente es un placer leerlo.
Muy interesante la entrevista, sobre todo en cuanto al proceso creativo, y muy interesantes también los vídeos 🙂
Un saludo y espero leerte de nuevo por aquí!
Muchas gracias, tx2z! Tardará un poco, pero ya tengo en preparación una nueva historia corta para la revista. ¡Seguimos adelante!