La baulera de Allmanzor: Serenity. Joss Whedon (2005)

Caminantes de la imaginación, la ficción y más allá: seguimos indagando en historias relativamente recientes para constatar que en el siglo XXI todavía perduran la imaginación y la creatividad.

La película recomendada hoy, constituye un caso verdaderamente atípico. ¿Una serie de televisión obtiene bajísimos niveles de espectadores, es cancelada con sólo doce episodios emitidos, y como premio se convierte en un film para la gran pantalla que obtiene buenas críticas y varios galardones?

Serenity. Joss Whedon. Año 2005.

Corría el año 2002 cuando el director y productor de televisión Joss Whedon decide abordar un nuevo proyecto tras la finalización de su exitosa serie “Buffy: the vampire slayer”. Whedon imaginó un futuro en el que la humanidad descubría un nuevo sistema solar al que poder trasladarse tras la degradación sin remedio de nuestra Tierra. Imaginó la naturaleza humana que no cambia, provocando una guerra civil entre facciones enfrentadas. Imaginó a los perdedores de esa guerra convertidos en forajidos espaciales que sobreviven sin corazón ni piedad. ¿O en realidad no son tan malos como dicen?

La serie Firefly sigue las peripecias de estos renegados que vagan en una vieja nave estelar aceptando cualquier trabajo que se les encargue, sea éste legal o no. Un variopinto grupo de tripulantes y pasajeros vivirán curiosas aventuras en ese lejano sistema solar durante los 14 episodios que, como ya adelantamos, son los únicos rodados antes de la cancelación.

La sorpresa vendría poco tiempo después, cuando las ventas en DVD del producto alcanzan altos niveles. Una latente legión de fans comenzaba a hacerse notar.

De modo que Whedon lo consigue: obtiene luz verde para rodar una película y dar así un digno final a la historia.

La película Serenity es definida inmediatamente como “space-western”, pero hay que decir que ofrece mucho más.

River es una adolescente con la que el gobierno realiza crueles experimentos mentales. Su hermano Simon logra rescatarla y embarcarla en un destartalado carguero modelo Firefly llamado “Serenity”, convirtiéndose así en fugitivos de la ley. Tras varios meses en el espacio, viajando con la extravagante tripulación y pasajeros varios, deciden quedarse en un planeta civilizado e intentar pasar desapercibidos para las autoridades que les persiguen. Cuando River queda hipnotizada por un videoclip televisivo, algo brutal se despierta en ella y se convierte en una máquina de matar que por poco liquida a todos a su alrededor. Al ver que la inocente muchacha puede volverse tan peligrosa, el capitán Malcolm duda entre abandonarla o salvarla. La lucha contra los perseguidores entra en un nuevo nivel, y un gran misterio aguarda en los límites del espacio conocido.

Se ha dicho que Serenity no se entiende sin el visionado previo de la serie Firefly, pero esto no es del todo exacto. La película posee suficiente entidad propia y funciona por sí sola, máxime cuando el alma del proyecto lo constituye el singular carácter de sus varios personajes. Tenemos un film básicamente de aventuras, con tirantes relaciones entre el capitán y algunos de sus seguidores. Un médico capaz de dejarlo todo y de empeñar la fortuna familiar, su trabajo y tal vez hasta su vida con tal de salvar a su Hermana River. Un tiránico estado que no duda en hurgar en la mente de psíquicos potenciales. Una especie caníbal que habita en los sectores más alejados y ataca todo cuanto se mueve. Robos, huidas, misterios… Y todo adornado con ingeniosos diálogos y situaciones impactantes.

Serenity será sólo una película de culto, pero es un espectáculo muy recomendable que, con un modesto presupuesto, logra entretener sin más pretensión que la pura aventura. Esto no quiere decir que no esté salpicada de geniales detalles en la personalidad de sus protagonistas y en sus frases de diálogo, presentando además una de las mejores batallas espaciales vistas en los últimos tiempos (¡y eso hablando, insistimos, de una producción de bajo presupuesto!).

Sin duda, son muchos los que aman esta joya del entretenimiento, aunque sin llegar al veredicto del jefe de los perseguidores que, al analizar una imagen del rostro de Simon rescatando a su Hermana River anuncia: “Vean su mirada. Eso es amor. No hay nada más peligroso en todo el universo”.

Si pueden, disfrútenla.

3 comentarios

  1. Yeah, me gustó mucho Firefly y también Serenity, que creo que es un final más que interesante para la serie 🙂 La serie es mucho más space-western que la película, pero ambas están muy entretenidas y los personajes te hacen querer seguir con ellos hasta el final.

    En fin, muy recomendable el visionado de ambas.

  2. Ignoraba que existiese una serie cuando vi por primera vez ésta peli y desde luego se sostenía por si sola sin problemas… o eso me pareció a mí;la batalla espacial es tremenda,como el diseño de las naves,desde luego;son muchas las distintas escenas muy diferentes unas a otras,casi abarcando distintos géneros y que lejos de probocar que ésto sea un disparate,no hace sino hacerla muy entretenida y muy visual… ¡y con poco presupuesto!;me gusta,la tengo y a veces repito,je,je!

  3. Lo mismo que yo: cuando se estrenó en cines me llamó la atención inmediatamente. No sé por qué, pero ya vi algo especial en la poca información que tenía. No sabía nada de la serie Firefly y la pelicula me encantó y entendí la historia sin ningún problema. Ya más tarde me enteré de la existencia de la serie. Hay que destacar el diseño de la nave Serenity: todos sus compartimentos tienen su lugar adecuado en el diseño y se corresponden con el exterior. Cuando un personaje se mueve por un pasillo, sabes dónde está y a dónde va. Es increible. Por supuesto la tengo en DVD y de vez en cuando disfruto repitiendo 🙂